¿Usarías collar antiladridos? piensalo mejor…

Un perro puede ladrar por infinitas razones, desde para jugar hasta para llamar la atención de sus humanos, porque está contento o para dar la voz de alarma, pero también por ansiedad, dolor, estrés o frustración. Una cosa es un ladrido de aviso y otra esos ladridos que no cesan, esos ladridos compulsivos que generan angustia y estrés en cualquiera que los escuche, hay gente que usa collares antiladridos pero si te lo has planteado debería seguir leyendo.

A nadie le apetece convivir con un perro que no para de ladrar todo el día, está claro, es un problema (real o percibido) que puede generar incluso demandas judiciales y que con toda seguridad indica que el perro tiene algún trastorno, físico o de conducta.

Lo recomendable es ponerse en contacto cuanto antes con algún educador canino para tratar el problema, para descubrir porqué ladra el can y poner remedio a ese comportamiento no deseado. No será de un día para otro pero se consigue.

Pero hay quien prefiere las «soluciones» milagro, como lo de las cremas que te crean abdominales barra de chocolate mientras duermes, y optan por colocarle al can un collar eléctrico para perros que emite descargas cada vez que ladra… Por eso me ha gustado toparme con este cortometraje de animación tan divertido del australiano Steve Baker.

Este corto ganó un puñado de premios cuando se presentó, hace ya cuatro años. El prota es un expresivo can de ojos grandes que no para de ladrar: en vez de tratar el problema, alguien decide colocarle uno de esos temidos collares antiladridos.

Digamos que el resultado no es ni el esperado ni el deseado por los que querían que parara de ladrar. El pobre perrusco intenta evitar las descargas, pase lo que pase… y ¡vaya si pasan cosas ante sus enormes ojos!

Digamos que hay un momento un tanto gore, en versión humor. Y digamos que es una forma diferente y divertida de mostrar porqué no se deben usar estos artilugios infernales.

Y pequeño spoiler, también se podría decir que el can, al final, se sale con la suya y es feliz 🙂

Fuente: http://www.srperro.com/

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